¿Ha empeorado la arquitectura en tiempos de crisis?

Lo que ha pasado desde el 2004 hasta ahora, se debe a un conjunto de factores muy complejos. En mi opinión la abundancia de dinero fomentó la existencia de más demanda y al final por esa demanda, los precios subieron y ese ciclo - porque el mercado siempre ha sido cíclico - se fue alargando más de lo esperado, hasta que la economía se recalentó y la situación explotó.

Todo el mundo era consciente de esto, pero quizás se perdió la perspectiva y se nos fue de las manos. Y las medidas que podían haber evitado llegar a la situación a la que hemos llegado no se tomaron pensando que podían tener un efecto perjudicial para el empleo.

En cuanto a la arquitectura, las consecuencias han sido importantes, la explosión del dinero fácil, del todo para ya, los proyectos como pipas, las obras como setas, ... ha sido catastrófico para la profesión. Hemos perdido el sentido del buen criterio, de las cosas pensadas y sopesadas, nos hemos mirado en esas estrellas internacionales: Calatravas, Pelli, etc ... y nos hemos olvidado de lo tradicional, nuestros maestros de siempre, los Cano Laso, Gayarre, ...

La nueva arquitectura que ahora vemos es igual en todas partes ... vidrio, ladrillo, ... no se trata de un nuevo sistema internacional, como el del Corbu, sino de algo banal, simple e inmediato .. cualquier programa informático que se precie hace un rascacielos ... pero ¿hace arquitectura?.

Ahora, que ya no hay dinero fácil, que no hay proyectos de obra nueva ni vieja, ahora que tenemos que hacer arquitecturas de papel. Es el momento de ralentizar nuestros pocos trabajos y pensar, aunque sea más por obligación que por devoción, y aprovechar la ocasión para preguntarnos... 

¿hacia dónde va nuestra "moderna arquitectura"?

¿cuál es el futuro de nuestras promotoras, nuestros principales clientes...?

¿la buena arquitectura sólo se hace sobre obra nueva?  

¿es la rehabilitación el futuro de la profesión?

¿es el momento de actualizar nuestro parque inmobiliario? y ¿debemos aprovechar la ocasión para mejorarlo?

¿la nueva Ley del Suelo en qué nos ha afectado?, ¿hay que frenar la valoración optimista de los suelos en función de expectativas de recalificación que no es seguro que vayan a tener lugar?

y más preguntas... qué nos iremos haciendo y si es posible, iremos respondiendo.